Título: El verano de las segundas oportunidades.
Autor: Morgan Matson.
Editorial: La Galera Young.
Saga / Autoconclusivo: Autoconclusivo.
Fecha de publicación: 02/2017.
Páginas: 426.
Precio: 17,05 € (Físico) / 8,07 € (Kindle).
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Gracias a la colaboración de La Galera

Sinopsis: La familia de Taylor no es que esté demasiado unida... Pero no es por falta de afecto, simplemente, están todos muy ocupados. Pero entonces el padre de Taylor recibe una noticia devastadora, y sus padres deciden que la familia va a pasar el verano, en la casa de las montañas a la que solían ir hacer tiempo. Embutidos en una casita diminuta, la familia empieza a conocerse de nuevo.
Pero, además, Taylor descubre que personas que creía haber dejado atrás, siguen ahí. Su antigua mejor amiga está allí, así como su primer novio... y es mucho más guapo ahora que tiene diecisiete que cuando tenía doce.
A medida que pasa el verano y Taylor se da cuenta de que su rival es el tiempo y que, a pesar que su especialidad es huir de las cosas, está es una batalla que no podrá eludir. Pero, sin embargo, a veces, hay tiempo suficiente para las segundas oportunidades... tanto con la familia, los amigos y con el amor.

​"El verano de las segundas oportunidades" es una novela de Morgan Matson, autora, entre otras, de las novelas "Amy y Roger" y "Desde que te fuiste".

Me llamó la atención esta novela tras ver varias reseñas con buena puntuación. Además, tenía ganas de leer algo de esta autora ya que todavía no había leído ninguna de sus novelas publicadas hasta la fecha.

El libro es bastante lineal, sin grandes giros ni sorpresas, pero con una historia cuya magia se encuentra en lo bien contada que está y lo agradable que es de leer. Quizá al comienzo me resultó un poco lento pero, una vez puesto en situación, me enganchó bastante y pasaba páginas casi sin darme cuenta. Hay saltos temporales entre sus capítulos que también hacen de ella una lectura más amena. Además, estos saltos temporales, ayudan a comprender mejor lo que sucede en el momento que se cuenta la historia.

A lo largo de más de 400 páginas, la autora nos cuenta la historia de la familia de Taylor, narrada en primera persona por la propia Taylor. Cuando su padre recibe una muy mala noticia, deciden pasar el verano en la casa del lago que habitaban hace unos años y donde Taylor tenía amistades que había dejado atrás.

Aproximadamente en la mitad del libro, comencé a meterme de lleno en la historia y ya no pude parar de leer. Es una novela que me enganchó sobre todo por los personajes que, aunque no destacan demasiado ni tienen grandes rasgos que los diferencien, conseguí conectar con ellos por su cercanía y por lo reales que me parecían.

Si alguien espera encontrarse una historia romántica creo que este no es su libro. En el libro hay amor pero no está tratado de una manera tan profunda como las novelas románticas. Además, creo que no es una historia que vaya a ser recordada por ese aspecto ya que hay otro tema mucho más importante en ella. Por este motivo, creo que la portada en la edición española no refleja bien lo que implica la historia aunque no puedo negar que es muy bonita.

Si tuviese que resaltar aspectos negativos, diría que se echa en falta algún que otro diálogo más porque en ocasiones se hace un poco pesado. Además, algún giro estaría bien para darle un poco de emoción a la historia. Y a la historia de amor le ha faltado reforzarla un poco porque no se refleja demasiado el deseo entre ambos y sucede todo un poco de manera apresurada. Por estos aspectos le he puesto un 4 en vez de un 5 ya que por lo demás me gusta muchísimo.

Los últimos capítulos son increíblemente desgarradores. Fue bastante duro leerlos porque la autora consiguió transmitir a la perfección la situación que estaba viviendo la familia. No puedo decir mucho más por no cargarme la historia pero estoy seguro de que, aquellos que lo habéis leído, estaréis de acuerdo conmigo.

Es un libro que no se olvida rápido y después de leer el final me ha dejado reflexionando bastante. Si sois muy sensibles os hará llorar. Rectifico: os hará llorar mucho.

En resumen: una buena novela que conquista por la cercanía de sus personajes, por su narración sin sobresaltos y por su final desgarrador.